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Higiene Corporal en Salobreña

Higiene Corporal en Salobreña

Una buena higiene corporal permite dinamizar y proteger al máximo todos los recursos del cuerpo y del espíritu.  Por eso, hemos decidido dedicar el post de hoy a todos los aspectos que debemos tener en cuenta para poder decir que gozamos de una higiene saludable.

La Piel es el reflejo de la salud y del equilibrio del individuo. Requiere cuidados específicos. La ducha tonifica y despierta, sobre todo, si se termina con un chorro de agua fría. El baño es un momento de relajación que prepara para el sueño. La temperatura perfecta es de 37 a 38 ºC.

La duración ideal es de 15 a 20 minutos. Es preferible utilizar un jabón graso, un cosmético suavizante o una pastilla dermatológica si la piel es delicada y tiende a secarse. Los aceites nutren mejor la piel que las sales de baño perfumadas.

Los baños que contienen algas regeneran y añaden un ligero efecto adelgazante. Los accesorios de baño, como la esponja vegetal, el guante o la faja de crin (pieles normales y grasas) o los cepillos (pieles delicadas) permiten eliminar las células muertas, limpian la epidermis a fondo y la dejan mucho más lisa.

Desmaquillaje. Tiene como finalidad limpiar la piel de los productos cosméticos y el exceso de grasa acumulados durante el día y que taponan los poros. Así pues, resulta imprescindible desmaquillarse todas las noches con una leche limpiadora (pieles secas y delicadas) cuyo exceso se retire con tónico sin alcohol, una pastilla, una espuma o un gel que se emulsiona con agua (pieles normales y grasas). Los ojos, delicados, siempre se desmaquillarán antes que el rostro.

Manos. Se deben lavar antes de sentarse a la mesa, antes de maquillarse y desmaquillarse, de tocar alimentos o vajilla, de tocar a un bebé y después de comer. El lavado de manos se efectúa con un jabón suave y un cepillo para las uñas, y se acaba con un poco de leche suavizante.

Pies. La higiene de los pies debe ser particularmente rigurosa. Deben lavarse una o dos veces diarias y ser tratados por un podólogo en caso de callos, durezas, etc. Cada diez días, más o menos, se tratarán las partes callosas con un producto especial y, lo más a menudo posible, se dará masaje al pie con leche corporal. Es importante secar siempre bien entre los dedos y vigilar cualquier tipo de micosis, como el denominado pie de atleta, que se contrae muy fácilmente en gimnasios e instalaciones con vestuarios comunitarios. Una vez a la semana es aconsejable un baño de pies, la eliminación de durezas con piedra pómez y un corte suave de las uñas en redondo sin cortar los ángulos.

Higiene íntima. La región anogenital, rica en glándulas apócrifas y vello, mal aireada en razón de su situación anatómica y de la utilización de ropa, requiere una higiene estricta. El aseo debe hacerse con jabones extragrasos o dermatológicos (neutros o ácidos, pero no alcalinos). Durante la menstruación, la mujer efectuará tantos aseos como sean necesarios.

Cabello. El uso muy frecuente de un champú demasiado agresivo puede provocar una seborrea adicional, dando al cabello un aspecto graso. Si usas un champú adquirido en farmacia, será más tratante que detergente y por tanto, podrás lavarte el cabello varias veces a la semana, incluso todos los días.

  • Cabello seco: quebradizo, difícil de peinar, fácilmente electrizable; puntas normalmente abiertas. Mejor usar champús suaves a base de componentes como huevo, médula de buey, queratina o extractos naturales de plantas.
  • Cabello graso: padece un exceso de secreciones seborreicas. La necesidad de lavarlo más a menudo irrita las glándulas sebáceas y acentúa el aspecto aceitoso. No es aconsejable sobrepasar los 2 lavados por semana con un producto especial, normalmente a base de aceite de enebro, quina, madera de Panamá o extractos vegetales.
  • Cabello con caspa: escamas que caen sobre los hombros. Proviene de un exceso de descamación del cuero cabelludo. Si el cabello es normal o seco, se recomienda alternar un champú anticaspa y un champú suave. En el cabello graso, la caspa se fija al cuero cabelludo. Su eliminación se efectuará al mismo tiempo que el exceso de seborrea.

A la hora de usar el champú, con poco producto es suficiente. Para tonificar el cuero cabelludo, se recomiendan algunos movimientos circulares de masaje haciendo espuma con el champú. Es importante enjuagar bien. Los cabellos teñidos, permanentados, secos o estropeados quedarán mejor con la utilización de un suavizante después del champú.

La higiene del cabello requiere el cepillado al menos dos veces diarias: éste limpia el cabello, lo airea, lo tonifica y permite mantener el peinado.